Ayer fue el vídeo y hoy, regalo, el tumblr de Stoya, donde cuenta su experiencia con los vibradores y grabando el vídeo… Y por cierto, también enlaza un vídeo de Stoya más joven con camiseta singlet/tanktop. ARF.

El texto es muy largo, pero esto, dividirlo en dos días ya me aburriría un poco…
Bueno, a traducir se ha dicho:

Literatura histérica

«En todo esto hay un vídeo. Lo dejo a tu elección si primero lees o primero lo ves.

Nunca he entendido los vibradores. Han publicado frases mías muchas veces diciendo varias versiones de «No me gusta ningún vibrador excepto Nea de Lelo, el cual sólo aprecio estéticamente». Creo que es el zumbido lo que me molesta. He posado para muchos posters con juguetes, pero siempre los he visto como el triste sustituto de una persona y nunca he tenido un orgasmo con uno. Haces menos de un mes estaba en una mesa redonda en Exxxotica con algunas de las actrices más exitosas de la industria para adultos. Alguien entre el público preguntó cual era nuestro vibrador favorito y cada una de las otras mujeres grito «Hitachi» al unísono. Esa noche recibí un email de Clayton preguntándome si me interesaría participar en su nuevo proyecto.

Él esta filmando a mujeres sentadas en una mesa leyendo literatura. El giro inesperado es lo que pasa debajo de la mesa. Me gustan este tipo de cosas. This Empty Love es el primer vídeo en que disfruté trabajando, convirtiendo hacer trabajo hardcore con Digital Hardcore una interesante opción más adelante. Creo que las partes interesantes del sexo son las indirectas que no se pueden ver. El sexo con penetración, después de todo, es una exploración de algo oscuro, húmedo y similar a una cueva.

He elegido un fragmento de «Necrophilia Variations», de Supervert’s. Me fascina Supervert y su obra. Elegí ese libro centrado en la Necrofilia porque tengo en este momento una obsesión extrañamente no morbosa con algo entre la manera en que el orgasmo afecta a la química cerebral, las razones detrás del sobrenombre frances de la petit mort, y por qué mi mente se queda en blanco completamente cuando estoy en el culmen de una experiencia sexual. Hay algo ahí, muerte y sexo, quizá cambio o evolución, y me he centrado en ello desde poco antes de postear «Touch«. A veces puedo rozar ese concepto con la punta de mis dedos, pero no puedo atraparlo e inspeccionarlo todavía. La única manera de entenderlo es sumergirse en cualquier cosa que pueda dar una pista hasta que todo encaje (o me distraiga con algo brillante… pero tendría que ser *realmente* brillante). Tl; dr: [?] Ese es el libro que me pareció el correcto.

Me han dicho que me vista como si estuviera yendo a una cita con un hombre, no con un chico. Llevo un vestido de Vivienne Westwood de la colección Anglomanía del año pasado. El corte limita el movimiento de los brazos, pero se supone que no tendría que abrir mis puertas o sentir deseos de hablar por teléfono mientras estoy en una cita con un hombre. Mi maquillaje es sencillo, mis tacones son muy altos pero relativamente cómodos, y mis bragas son a la vez sofisticadas y caras. Y también, un charco en las bragas. Sexualmente me gustan las cosas impredecibles y cosas que son nuevas para mí. Este juego de intento-de-leer-en-voz-alta-y-mantener-la-compostura mientras soy sexualmente estimulada es nuevo para mí. La cámara le da el toque exhibicionista que siempre agradezco. Más interesante, de todos modos, es el Hitachi de quien mi vagina se va hacer buena amiga por primera vez.

Cuando le cuento a la encantadora ayudante de Clayton esa noche que nunca he experimentado el Hitachi, su ojos se iluminan. Obviamente me acabo de meter a mí misma en un lío muy divertido. Se encienden las luces y todo el mundo va a su posición. Mi ropa interior está en el suelo, fuera de cuadro. Empiezo a leer, desaparece mi incredulidad. Olvido lo que está a punto de suceder. El primer toque en mi muslo envía toda la sangre disponible a mi vulva. Sigo leyendo correctamente, centrándome en el texto. He empezado a sudar. Si esto sigo durante mucho más tiempo el pelo me va a quedar aplastado contra la cabeza con el sudor como si hubiese estado en el gimnasio o me hubiese dedicado a sexo penetrativo y acrobático hombre/mujer. Me equivoco en una palabra, mi concentración se rompe según vuelvo a pronunciarla correctamente. No se lo voy a negar al Hitachi ni a la mujer sujetándolo sino que en interés del arte (y porque esto da sensaciones de algo hermosamente sucio que no quiero parar todavía) continuo todo el rato que puedo. Este trozo del mundo que habito se ralentiza, se acerca de repente. Como una goma elástica estirada de repente se encoge, y soy golpeada amorosamente con un orgasmo.»

fuente original 
La foto ha salido del Instagram de Stoya (stoyatm, si queréis buscarla)
Por cierto ¿he dicho que Stoya tiene twitter? :-)

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