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Demostrado: Quien practica BDSM tiene mejor salud mental

7 August, 2014 at 11:00/ por

¿Está claro? Demostrado con datos. Así de categórico. Es la conclusión que se puede sacar del estudio Psychological Characteristics of BDSM Practitioners” *, publicado en 2013 en Journal of Sexual Medicine que me ha pasado una amiga. 

(Editado el 14 de agosto de 2014: El estudio en sus últimos párrafos advierte de los sesgos en la selección de individuos y otros factores que influyen en ese resultado, que NO es extrapolable a un grupo de personas distinto del analizado)

Ya sabemos que en muchos sitios aún se sigue considerando como parafilia (psiquiátricamente, por ejemplo, si provoca sufrimiento o incapacita). Ya se avanza algo en el DSM-5, en el que “el masoquismo, el sadismo y el fetichismo no son más desórdenes mentales, si se realizan en relaciones consensuadas y sin que las mismas produzcan sufrimiento emocional a las personas que las practican” (fuente). Desde luego considerando algo extremo popularmente, pero no hay que perder de vista de dónde viene esa idea: Se la debemos a Kraft-Ebbing y su “Psychopathia sexualis”, en el que describía comportamientos sexuales poco convencionales estudiados en sus pacientes… que eran los pacientes de un manicomio (como se hacía en el siglo XIX). Y claro, su conclusión lógica era “Si esto lo hace alguien que tiene una enfermedad mental, este comportamiento causa la locura”. Y claro, como el 99% de sus pacientes se masturbaban… de ahí aquella idea antigua de que la masturbación llevaba a la locura o pasarte algo malo.

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Como dice el estudio

“poco ha cambiado desde que Moser dijera que «la escasa comprensión del BDSM ha llevado a muchas ideas erróneas así como a tenerle miedo, lo que puede alienar todavía más a quienes tienen ese estilo de vida» (en Stiles and Clark [16], p. 159). Teniendo en cuenta la demanda de estudios sobre cómo es experimentado el BDSM por quienes participan en él y que el «estigma asociado al BDSM es inmenso y los mitos y mala fama asociada al BDSM están descontrolados», llama la atención que se sepa tan poco de las características psicológicas básicas de este subgrupo.” 

Con esa idea en mente realizaron este estudio los doctores Andreas A.J. Wismeijer y Marcel A.L.M. van Assen. El resumen del estudio es que a pesar de que siempre se ha relacionado la práctica de BDSM con la psicopatología (es decir, con tener alguna enfermedad mental), varios estudios recientes muestran cierta buena salud psicológica de quienes lo practican. En este estudio compararon a 902 personas practicantes de BDSM con 434 personas como participantes de control mediante cuestionarios online.

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Para quien sepa del tema (no es mi caso, por eso ni lo traduzco) “associations were examined using c2 tests of independence with j and Cramer’s V as effect size measures and eta or Pearson’s correlation. Group differences were tested using analysis of covariance, with partial h2 as effect size measure. A priori contrasts were tested using a = 0.01 to correct for multiple testing; for all other tests we used a = 0.05, two tailed.”.

Se midieron usando el Inventario de Personalidad Reducido de Cinco Factores (NEO-FFI), evaluación de los tipos de apego adulto (PDF), cuestionario de sensibilidad al rechazo, y la valoración subjetiva del bienestar con el Índice (5) de bienestar de la Organización Mundial de la Salud (PDF).

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Los resultados muestran características psicológicas favorables en quienes practican BDSM comparado con el grupo de control. Las personas que practican BDSM eran menos neuróticas, más extravertidas, más abiertas a nuevas experiencias, más conscientes, menos sensibles al rechazo, sentían subjetivamente que su bienestar era mayor y que eran más asertivas. Comparando los cuatro grupos buscando diferencias, los resultados eran generalmente más favorables para quienes estaban en un rol dominante que para las que estaban en rol sumiso, y los controles obtenían peores resultados.

Como conclusión —sigue el resumen del estudio— afirman que se puede ver el BDSM como una actividad recreativa, en lugar de como la expresión de procesos psicopatológicos. Es decir, de enfermedades mentales. Y ese cambio, ese punto de vista es algo que también creo que —quienes estamos en el activismo— deberíamos ir apoyando, difundiendo, visibilizando poco a poco para que acabe desapareciendo la percepción típica del BDSM. 

 Y aparte de la conclusión del estudio, están las conclusiones que se pueden sacar, claro.

¿Si practicas BDSM significa que estarás mejor mentalmente? Pues sí…si es lo que te atrae, claro. Eso no significa que sea algo que te vaya a recomendar tu terapeuta mañana para sentirte mejor, aunque no te atraiga el BDSM en absoluto, claro está.

 ¿Significa este estudio que todos los colectivos BDSM están llenos de personas mentalmente mucho más saludables? Pues no lo entiendo así. Estos resultados son estadística, es decir, que es una media y moda que se obtienen de una serie de datos que varían. Y todo el mundo conocemos personas dentro de estos colectivos que tienen sus “particularidades”. Pero claro, hay que tener cuidado de no volver a hacer mal la ecuación. El que conozcamos personas en esos colectivos que nos dan la impresión (nada científica) de ser psicológicamente muy diferentes a la media, o con una carencia importante de empatía o que directamente tienen comportamientos de abuso, no quiere decir que entonces el BDSM lleve al abuso. Más bien que ese ambiente puede ser utilizado por personas con ese perfil. Además de que esto ya no es como en el pasado… Gracias a internet, ya no existe un único ambiente BDSM sino muchos grupos distintos, cada uno con sus peculiaridades…

No olvidemos cual es la conclusión del estudio, la repito aquí: “se puede ver el BDSM como una actividad recreativa, en lugar de como la expresión de procesos psicopatológicos”.

 

*Datos completos de autores y procedencia del artículo: Wismeijer, A. A.J. and van Assen, M. A.L.M. (2013), Psychological Characteristics of BDSM Practitioners. Journal of Sexual Medicine, 10: 1943–1952. doi: 10.1111/jsm.12192. © 2013 International Society for Sexual Medicine del original en inglés.

 

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