Los celos. Ay, los celos.
5 April, 2010 at 6:00/ por moscacojoneraEl sábado nos reunimos un@s poc@s a hablar sobre los celos. Qué se sentía, qué hacer, cómo manejarlos, si era bueno tenerlos, si no…
- Es normal tenerlos, todo el mundo los tiene.
- Se puede decidir no tomar decisiones basándose en esa sensación de celos.
- No es lo mismo los celos (“no quiero que folles con esa persona”) que la envidia (“yo también quiero que folles conmigo”).
- Hay que darse permiso para tenerlos, no es malo tenerlos. Lo malo es “dar por culo” por tenerlos y echar la culpa de tenerlos a la otra persona. Igual la otra persona ha roto un acuerdo que teníais (es responsable de eso) pero no es responsable de los sentimientos que te surgen.
- Es necesario (antes de que la pareja se abra) que los dos de la pareja decidan abrirla y hacerlo poco a poco.
- Es conveniente aprenderse sistemas para manejar esos celos cuando aparecen.
Dicho esto, también aclarar: estábamos de acuerdo de que todo esto es aplicable en una pareja que se ha dedicado a conocerse mutuamente… una pareja en que cada miembro se conoce a sí mismo, que se ha trabajado la comunicación. Pero que es una bomba si se mete en una pareja en que un miembro manipula al otro, por ejemplo, en que l@s dos no tienen la misma libertad para irse a follar por ahí.
“Mi primer consejo para cualquiera que esté considerando una relación abierta sería hacer el proceso de apertura juntos”, dice. “La gente suele salir y encontrarse con alguien más, entonces lo traen y lo discuten con su pareja, y esto es lisa y llanamente engañar. El comienzo de una relación abierta puede ser un problema si no se hace con las dos partes completamente involucradas.”
Siendo un tema que da tanto de sí y que se nos aplica a tod@s, seamos poly, abiertos, cerrados, etc he optado por aprovechar los días de viaje para que salga publicado cada día una nueva pequeña parte traducida de The Ethical Slut.
“Cuando culpamos a nuestr@ amante por estar celos@, estamos intentando justificar nuestro intenso deseo de no tener que escuchar cuánto duele cuando vamos camino de la puerta para ir a jugar con otra persona. Es una manera horrible de evitar tener que enfrentarte con tus sentimientos de culpa. Si esto te suena familiar, si has experimentado momentos como este en tu vida, te recomendamos que practiques la habilidad de quedarte en silencio con el dolor de tu amante y el tuyo.”
Este tema me recuerda a una cita de Marco Aurelio: Elimina tu opinión, y eliminarás la queja “me han ofendido”. Elimina la queja “me han ofendido” y la ofensa ha desaparecido.
Como siempre interesante, me copo con estos temas :-)
Ah me gustó mucho la foto de los congelados, muy buena.
Besos
lo bueno es q es un tema q todos entendemos…
Se echo de menos en la reunion un punto de vista discordante. Todos opinabamos casi igual!
cierto!