“No son celos. Es envidia” ¿Es buena o mala la envidia?
1 September, 2016 at 20:13/ por moscacojonera
Es una frase que surge a menudo en la no-monogamia: “No, si no siento celos. Lo que siento es envidia”. Esa envidia ¿es buena?¿es mala?¿debemos sentirla? Bueno, esas son tres de las preguntas equivocadas. Lo mejor con las emociones es que las entendamos y a partir de ahí decidamos qué podemos hacer con ellas, dependiendo de muchos factores en nuestra vida. Cuanto más sepamos de ellas, mejor. Y como se da no sólo en las relaciones no-monógamas, sino en muchas situaciones en la vida, mejor saber más sobre ella.
El mejor enlace que me han sugerido por ahora sobre el tema (cuando haya algo mejor, lo pondré aquí) es este análisis hecho por Norberto Levy, que escribe y da cursos sobre autoayuda. Que sí, que hay mejores opciones que la autoayuda. Pero son más caras. A veces en la vida no te puedes permitir más que libros y videos que te encuentras en internet…
Transcribo parte del vídeo:
La envidia es una emoción universal, todo el mundo puede sentirla si se dan ciertas condiciones:
Que yo vea o sepa que estás realizando algo que yo deseo, y no estoy logrando.
Que yo sienta que no lo estoy logrando porque no tengo recursos para lograrlo, y que nunca lo voy a lograr.
Que yo sienta que no tengo una cuota de deseos realizados en otras áreas para que compensen ese dolor.
El dolor —la envidia— viene del contraste entre lo que percibo y lo que tengo. Y por eso se quiere evitar ver eso. Y eso ha hecho creer que la envidia es una forma de odio. Pero el odio se puede ver como una forma de la necesidad impotente y desesperada cuando se confronta con un contraste intolerable. Y aunque intenta destruir el logro del otro, lo que intenta eliminar la envidia es el contraste. No busca principalmente destruir el logro ajeno, sino esa diferencia.
Si se tiene la manera de superar ese contraste, si se tiene la manera de cumplir los propios deseos, se transforma la envidia en admiración.
El resto de la explicación en el vídeo.
Qué bonito, me ha hecho reflexionar sobre cómo superar la envidia, y al final, la respuesta para todo siempre es: trabajando en uno mismo. Saludos.
Qué bien cuando son útiles las cosas que vamos encontrando :-)