Empapados en sangre y semen (7) [Traducción propia]
20 julio, 2011 a las 5:00/ por moscacojoneraLa principal hipótesis de la Teoría Queer es la performatividad. Judith Butler, la filósofa queer y teórica feminista describe la performatividad en «Critically Queer» como «…el poder reiterativo del discurso para producir el fenómeno que regula y constriñe» [17]. El concepto pone énfasis en las formas en las que la identidad es aceptada o nace a través del discurso. Los actos performativos son tipos de discurso con autoridad. De todos modos, esto sólo puede suceder y ser impuesto a través de la ley o normas sociales. Estas declaraciones, simplemente por decirlas, conllevan una cierta acción y exhiben un cierto nivel de poder. Butler insiste que el género es un acto que ha sido ensayado, de manera muy parecida a un guión, y que nosotrxs, como intérpretes convertimos ese guión en una realidad una y otra vez al llevar a cabo esas acciones.
Si la gente queer puede entender su sangrado como metamórfico, se abren nuevas posibilidades para crear posteriores sustitucuones hacia la justicia social. Hoy día es impensable que el ritual sangriento de la guerra del hombre patriarcal pueda ser sustituido por nada. Pero la extensión de la consciencia metamórfica podría crear un espacio para honrar los rituales de sangre de los hombres gay; ¿qué sucede si la necesidad del ritual sangriento de la guerra pudiera ser satisfecho con el sangrado anal de los hombres gay por placer?
La teoría queer y la teoría metamórfica se cruzan mutuamente en puntos cruciales. Los mecanismos del Poer Colonial o hegemonía se describen metamórficamente como «necroformas» [21]. O literalmente, formas muertas. La metaformas queer han estado sobreviviendo a través del uso de una geografía crítica underground permeable,[permeable underground critical geography] durante miles de años. Hoy día tenemos una proliferación de identidades queer, formas culturales y consciencia a la luz del día, en los medios y en el discurso. Esta reaparición delas formas queer en un momento en que las viejas metaformas (necroformas) nos van llevando poco a poco hacia la aniquilación del ecosistema es una premonición de la necesidad de cambiar los rituales que sostienen la existencia.
[17] Judith Butler, «From Critically Queer,” in Identity: A Reader, ed. Paul du Gay (London: Sage Publications, 2001) 108.
[18] Judy Grahn, interview by the author, May 3, 2007.
[19] Grahn, Blood, 149.
[20] Ibid., 275.
[21] Ibid., 266.
Sin embargo conocemos culturas en las que el macho homosexual participó (y en alguna aún participa) igualmente del ritual de sangre. El caso más célebre, el del batallón sagrado de Tebas, pero el homoerotismo era usual en culturas guerreras como las de las tribus de las praders, pueblos de Borneo y Malaisia, el Japón medieval…
Se diría entonces que el alejamiento del homosexual del círculo masculino «duro» se produce a consecuencia del dominio monoteísta y patriarcal (cristiano, judío o musulmán)
Ya sabes que sólo diré lo que pienso de esto en frente de una(s) cerveza(s)
delante de la cerveza me niego :-)
Dinos cuánto te ha costado (sangre, sudor y semen) traducir al castellano el texto de marras.
Por cierto te paso el link a lo de Sokal para que veas a dónde voy de dónde vengo: http://es.wikipedia.org/wiki/Escándalo_Sokal
Danton, anda anda anda, espero que seas más serio para otras cosas…
¿y en cada sitio que no estas de acuerdo plantas el enlace a lo de Sokal?
Hay mucha gente que mete en el mismo saco el postqueer, el queer, el transfeminismo, el postporno y usando el mismo resumen: Chorradas y mamarrachadas. Pues vale… Entiendo que todo eso no le es útil a quien no tiene que darle vueltas a temas de género… Hay gente a la que nos vienen bien.