Selección de idioma

Fetichismo y mal periodismo: ¿Medios generalistas sí o no?

30 agosto, 2012 a las 11:11/ por

Cada vez que aparece la posibilidad de que una televisión, un diario, una revista haga un artículo sobre el fetichismo, el BDSM, el mundo swinger, etc surge el mismo debate: ¿Es bueno que los medios «normales» tengan acceso a esa información, que se hable con ellos, que se les cuente cómo son las relaciones sadomasoquistas, las fiestas swinger, el fetichismo del látex?.

Como entiendo que es un debate moral, pues no hay acuerdo, porque —afortunadamente— cada cual tiene sus principios. Lo que me parece normal, a la otra persona le parece horroroso. Así que suele haber debates acalorados sobre este tema cada vez que hay un reportaje. Entiendo que el debate no es estratégico, porque no existe ninguna estrategia planificada ni activismo organizado en ninguno de esos colectivos, aparte de microasociaciones de las que no he vuelto a saber poco después de que se creasen.

Yo siempre hago paralelismos con la lucha LGBT. Al principio los reportajes sobre gays, lesbianas y transexuales. Cuanto más salió del armario lo gay/lésbico, menos «morbosos» se hicieron los reportajes. Los de transexuales siguieron siéndolo más tiempo pero poco a poco se han ido haciendo más objetivos. Los de bisexuales se considera poco «extremo» como para atraer audiencia.

¿Podemos imaginar hoy a gays/lesbianas diciendo «paso de los medios»? Creo que hoy día ya sólo depende de si el programa es más o menos recomendable, de si el periodista es más o menos de fiar, pero el debate medios-sí/medios-no afortunadamente ya no es el tema. A eso se suma ya tener muchos medios propios, con lo que ya dejas de depender de la visión que quieran dar de ti: Tú eres quien cuenta la película, quien construye el relato.

Sé que no está todo el mundo a favor de naturalizar el poliamor, lo swinger, las parejas abiertas, el bdsm, el fetichismo, el travestismo, el crossdressing, las perversiones… Que somos minoría, Josep Lapidario y yo, hasta donde yo sé, quienes estamos a favor de que estas cosas se hagan cada día más habituales . A favor de la naturalización, de que cada vez abunden más esas conductas, se vean como nuevas «especies» de esa sociedad y no la normalización.

«(…)El concepto de normalización se encuentra en el trabajo de Michel Foucault, especialmente en «Disciplina y castigo», en el contexto de su descripción del poder disciplinario. Como usa Foucault el término, la normalización incluye la construcción de una norma de conducta idealizada —por ejemplo la manera en que un soldado idealmente debe estar de pie, marchar, presentar armas (…)— y después recompensando o castigando a los individuos por conformarse o desviarse de este idea. Según Foucault, la normalización era una de un conjunto de tácticas para ejercer el máximo control social con el mínimo empleo de la fuerza, lo que Foucault llama «poder disciplinario». El poder disciplinario emerge durante el siglo diecinueve, se hizo común usarlo en barracones militares, hospitales, asilos, colegios, fábricas, oficinas y similares, de ahí que se convirtiese en un aspecto crucial de la estructura social en la sociedades modernas.» (fuente, wiki)

Es decir, yo sí veo interesante ir haciendo conocidas estas prácticas no convencionales, sin convertirlas tampoco en conductas a imitar. Hacerlas conocidas como parte de una estrategia más amplia de activismo en más direcciones. Por eso seguiré cayendo en esto de los periodistas y las entrevistas…

Y con esto ya termino con el tema.

No hay comentarios todavía

Dejar una respuesta

Mensaje:

logo_lateral
 

Archivo