Los problemas de dinero y la crianza en las relaciones poliamorosas (El libro de las rupturas poliamorosas, Kathy Labriola)
20 mayo, 2020 a las 9:35/ por moscacojonera«A menudo, las familias poliamorosas no tratan las cuestiones de dinero que se derivan, o el trabajo que supone, la crianza. Pueden no haber hablado sobre quién pagará esos gastos y quién hará el trabajo. Desafortunadamente, muchas personas poliamorosas no llegan a acuerdos antes del nacimiento de la criatura. Y muchas veces, alguien con quien se tiene una relación y que ya tenía criaturas, se muda para convivir sin haber hablado sobre si las otras relaciones van a dar apoyo económico y cuidar de esas criaturas. Eso provoca que cada persona involucrada den por sentado cosas diferentes, lo que lleva normalmente al desastre, a menudo terminando en ruptura.
Por ejemplo ¿cada persona va a dedicar parte de su tiempo a cuidar de las criaturas que haya en la casa y a compartir los gastos de «canguros»? Si es así, ¿cáuntas horas al día, cuántos días a la semana?¿Se espera que cada miembro de la casa participe igual en la crianza o tendrán toda la responsabilidad (o más responsabilidad) su madre/padre biológica/o?¿Quién aportará ayuda económica a la crianza y cuánto?
A veces, la madre biológica (y en algunos casos, el padre) asume que se quedarán en casa con el bebé y que el resto de la familia les sostendrá económicamente, mientras que otros miembros de la familia pueden no estar de acuerdo con eso, o incluso, ni haberlo hablado. Más a menudo, una familia poliamorosa llega a un acuerdo previo de sostener económicamente a la madre biológica para que pueda estar en casa y cuidar del bebé por un tiempo determinado, pero ella decide alargar ese tiempo. El resto de la familia se puede sentir traicionada porque nunca dieron su consentimiento para que eso sucediera.
Otras veces, los miembros de la familia acuerdan antes el apoyar económicamente a la madre/padre y el bebé, pero luego descubren que les molesta estar pagando los gastos de otra persona, empiezan a sentir que es injusto y demandan cambiar el acuerdo.
Puede ser que las criaturas estén en la guardería todo el día porque todos los miembros de la casa están trabajando, y la madre/padre biológica puede dar por hecho que el resto de sus relaciones compartirán el coste a partes iguales. En una triada «en uve» con un hombre y dos mujeres heterosexuales, la nueva madre tenía el acuerdo de la familia de contratar a alguien para cuidar del bebé a tiempo completo. Lo que no mencionó la madre es que pensaba pagar a esa persona con el dinero de la casa, asumiendo que era un gasto de la casa, pero la otra pareja de su pareja le dijo «¿Por qué debo pagar el cuidado de tu bebé? Yo no te dejé embarazada, no es mi responsabilidad».
Algunos miembros de relaciones poliamorosas pueden no querer la responsabilidad de sostener económicamente a la criatura, especialmente si no han tenido un papel en provocar el embarazo, ni tienen control sobre la decisión de continuar con él. Puede que no estén de acuerdo con apoyar económicamente que uno o los dos progenitores se quedaran en casa con el bebé, y les parezca mal que se haya dado por hecho.
A veces el asesoramiento o la mediación puede ayudar a una familia a llegar a acuerdos que hagan que todo el mundo se sienta respetado y a gusto. De todos modos, muchos embarazos no planificados llevan al divorcio o a la ruptura de familias poliamorosas debido a diferencias irreconciliables».
Extracto de “The polyamory breakup book”, de Kathy Labriola. Pag. 32-34 ©2019 Kathy Labriola; ©2019 Thorntree Press; Traducción: miguel vagalume. Kathy Labriola es terapeuta de relaciones no monógamas desde hace más de veinte años. Su otro libro, que traduje hace unos años, es “El libro de los celos (en las no monogamias)”. Se puede encontrar en Melusina.