Pues resulta que cuando parecía que era difícil que saliesen más cosas mal, salieron.
Los billetes que habíamos comprado para ir en tren en un compartimento los dos solos… resultó ser un viaje en segunda sentados. Para flipar. Intentando dormir entre gente de charla, niños chillando, ruido… Im–presionante.

Lo reconocieron todos los empleados de las taquillas con los que hablamos. «Ya, si da errores continuamente», «es que si no va a la primera, pagas y no tienes billete», «yo es que no compro por internet, pero sí, da un montón de errores». Textual. Una empresa de ese tamaño… Nada nuevo en el país. Como siempre. ¿No es más recomendable hacer un test de la web sin subirla y cuando funcione todo, ponerla a andar?.

O sea que ya saben… por tentador que suene, yo no compraría por internet.
Y hemos comprado mucha cosa por internet, o sea, que no es por falta de práctica..

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