Reflejando la diversidad: mejor en un espectro que con muchas categorías
20 mayo, 2015 a las 11:00/ por moscacojonera
Siendo este siglo (preveo) el de la lucha por derechos para las identidades, en lugar de los grupos (orientaciones, géneros, etnias…), vamos viendo que cada vez hay más y más identidades diferentes. Y cuantas más categorías hay de algo más imposible es contener toda esa variedad en grupos separados. Cuanta más diversidad, más borrosos se vuelven los límites entre cada grupo, más subvariedades aparecen entre grupos…
En ese caso parece recomendable ir abandonando las categorías cerradas para pensar más en un espectro entre dos o más polos, en un abanico en el que podemos situar/nos entre varias opciones. La idea de espectro, gradiente o abanico tiene lo bueno de permitirnos movernos por ese espectro con más facilidad, a medida que nuestra identidad/prácticas vayan evolucionando con el tiempo, experiencias o las fases de nuestra vida.
Ese es el caso que ya comenté del colectivo LGTB. Ahora ya es habitual añadir una Q de Queer y una I de Intersexual. Y esas dos categorías han llegado para quedarse… A esas a veces se añade una A de Asexual (que bajo esa categoría se incluye a demisexuales y gris-asexuales). Ahí falta el concepto de trans* (más amplio que sólo trans) y otras identidades, por lo que a veces se añade un símbolo más +. Es decir, LGTBQIA+ No es tan complicado escribirlo, pero sí pronunciarlo. Y ya que se van añadiendo más y más identidades, en 2013 Pink Therapy propusieron usar GSD en lugar de LGTBetc. Son las inciales de «Gender and Sexual Diversities». Para importarlo al castellano (si se acaba haciendo, algunas personas ya lo usamos…) la propuesta sería hacerlo con las mismas iniciales que en inglés, GSD, significando «Géneros y Sexualidades Diversas», en lugar de que re-inventemos el término para que nadie lo encuentre, diciendo DGS (Diversidad de Géneros y Sexualidades). Manteniendo GSD nos será fácil encontrar material publicado tanto en inglés como en castellano, y no haremos como con LGTB, que en otros sitios es LGBT y si no lo sabes, hace complicado encontrar documentación. La ventaja de GSD es que, al incluir sexualidades diversas (en lugar de orientaciones), incluye también al BDSM, kink o el fetish, por ejemplo.
Resumiendo: El espectro amplio contenido dentro de GSD parece mejor que LGTBQIABDSMK, y seguirá refiriéndose a tantas subcategorías como surjan con el tiempo.
Lo mismo pasa con las relaciones no-monógamas. Aunque es muy útil tener un nuevo concepto que manejar, como «polisoltería» (persona poliamor sin pareja, al menos, sin una principal), para tratar su identidad y aportar recursos específicos, cuantos más tipos de relación surgen, más complicado es definir que algo es polisoltería y no una relación de «follamistad». Anarquía relacional, poliamor, poliamor sin sexo, pareja no-monógama, pareja abierta, swingers, top-bottom… Da impresión que resultaría más útil pensar de nuevo en el espectro o abanico en lugar de más y más categorías, para que se pueda referir a todos los tipos de relaciones que surjan. Y así cobra mucho sentido el subtítulo original de The Ethical Slut, «Guía para infinitas posibilidades sexuales«.
Incluso nos puede valer el mismo espectro/abanico desde la amistad hasta la relación. ¿En qué momento deja de ser follar-de-vez-en-cuando para ser follamistad honesta y de ahí a ser polisoltería o una relación sólida? ¿Dónde están las líneas que hacen que un tipo de relación se considere una cosa o la otra en la escalera de las relaciones?
…además lo de «DGS» evoca un infausto recuerdo.
¡Difundo!