Si tú tienes dos amantes, yo también
19 octubre, 2012 a las 11:00/ por moscacojonera
Es un error muy común al abrir la pareja. El querer que las dos partes de la pareja tengan lo mismo: ¿Tú tienes dos amantes más? Pues yo me busco también mi par de amantes. ¿Que tú quieres quedarte a dormir en su casa? Pues entonces yo también me quedo en su casa. ¿Que follas dos veces a la semana? Yo también.
Y aunque sea algo que te digan que no funciona, os va a costar MUCHO evitar probarlo. Porque es la primera tentación que se nos pasa por la cabeza, lo que nos parece más justo. Cuando en realidad no ayuda mucho a que funcionan mejor las cosas.
Imaginemos una pareja primaria con dos amantes secundarixs. Pongámonos que a ti, que estás en la relación principal, te gusta tener una cita semanal con tu pareja secundaria. ¿Cual va ser vuestra primera tentación? Que tu pareja principal tenga también una relación semanal…aunque no sea lo que esa relación necesita. Porque a lo mejor tu pareja es más solitaria y prefiere no quedar con otra persona de manera habitual, sino muy de cuando en cuando… (lo que, por ejemplo, puede darte sensación de culpa porque quedar tú más y quieres evitarlo). O resulta que las primeras semanas, con la emoción, tu pareja prefiere quedar tres veces por semana. ¿No va a poder hacerlo?. Porque quizá unas semanas después, cuando se ha pasado el subidón, sólo queda una vez al mes. ¿No puede ser 3 veces por semana durante un mes y una vez al mes durante los tres meses siguientes? ¿Deberían haberse distribuido esas citas uniformemente durante 15 semanas?¿Esas 5 citas extra que ha tenido tu pareja al no quedar de manera uniforme es algo totalmente inadmisible?¿Es inadmisible que lleve otro ritmo?
¿Y si en lugar de 15 citas, una semanal, quisiera irse una semana de viaje con su pareja secundaria?. ¿Y si, aunque tú tengas por ejemplo dos amantes, no le apetece estar con nadie en este momento, pero está muy a gusto contigo?…
Más que haber respuestas planteo muchas preguntas para darle una vuelta a esa idea, a algo que se habla también al hablar de parejas monógamas (imagina sustituir esos amantes por actividades concretas que le apetezcan): Igualdad frente a equidad. No hace falta que hagáis lo mismo, que tengáis lo mismo, sino que tengáis sensación de que es la situación en la que queréis estar. Algo no tan fácil cuando se entra en el terreno de otras parejas.
Mosca, no sé por qué, o bueno, si que lo sé, pero dices verdades como templos.
Sois de las pocas parejas que admiro, pues lo vuestro si es mente abierta y liberal de verdad, o al menos, esa es la impresión que yo percibo, cosa que muy pocas parejas, y conozco muuuuuuuchas, lo demuestran, sin embargo, presumen a lo grande de ello, una falacia más de nuestro día a día.
Enhorabuena por el post
Gracias :-) la verdad es que lo que hacemos es ir compartiendo —sobre la marcha— lo que se va aprendiendo. Cuando digo lo de que es complicado no es porque sea más listo, sino precisamente por no saber hacerlo e ir aprendiendo. Y entonces te das cuenta de lo fácil que es caer en determinados estereotipos, en los que te parece lógico caer (como la iguadad que comento) y después descubres que no, eso no funciona.