The Ethical Slut (19): Cap. 3: Paradigmas, viejos y nuevos (3)
15 diciembre, 2009 a las 7:00/ por moscacojonera«pecaminoso»
Algunas personas basan su sentido de la ética en lo que dios, o su iglesia, o sus padres, o su cultura considera que está bien y lo que no. Creen que ser buenx consiste en obedecer las leyes impuestas por un poder mayor que ellxs.
Dossie recuerda cuando explicó a unas amistades de la familia que ella había abandonado la iglesia en la que había crecido porque ella no creía que un dios justo castigaría a su tía por obtener (muy justificadamente) el divorcio. Las amistades de la familia eran personas bastante conservadoras, y de una generación anterior. Unx de ellxs le preguntó, «Bueno, si no crees que dios te castigará, ¿por qué no vas por ahí matando gente?». Dossie les explicó que ella no asesina gente por su sentido interno de ética, su empatía con lxs otrxs, y su deseo de sentirse bien consigo misma, todo eso le dice que herir a otra persona sería hacer algo terrible.
Creer que a dios no le gusta el sexo es como creer que a dios no le gustas tú: todxs acabamos arrastrando una vergüenza secreta por nuestros deseos y satisfacciones, perfectamente normales. Preferimos las creencias de una mujer que conocimos que es una devota. Nos dijo que cuando tenía alrededor de cinco años, descubrió el placer de la masturbación en el asiento trasero del coche familiar, arropada bajo una cálida manta durante un largo viaje. Se sintió tan bien que llegó a la conclusión de que su clítoris era la prueba evidente de que dios la amaba.
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Traducción de la edición de 1997 de The Ethical Slut. © Dossie Easton y Janet Hardy. Laversión actualizada ha sido publicada este año.
El dios en el que yo creo, el dios que no puedo evitar pensar que existe, supongo que es gustoso de verme feliz. ( No pienso abrir un debate en un post sobre porqué permite tanta mierda porque no lo sé. Sólo tengo fe en que me acompaña). Y me cuesta creer que se enfurruñe por saber cómo y lo bien que me corro. Me cuesta. ( Es lo bueno de la fe, que es tuya).
uma
En breve una crónica sabronsona de la Rubber Ball. Tengo que procesar emociones intensísimas para poder informar verazmente del evento,que es lo que realmente os interesa. Dios estuvo allí, entre las piernas y la lengua de una tal Betty (creo) y las mias.
Amén.
ah, suena como un interesante trailer! Gracias! :-) vamos afilando las orejas