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Purgas ideológicas y políticas

15 junio, 2018 a las 13:02/ por

Sigue sin existir en nuestro país un funcionamiento de las instituciones ajeno a los partidos políticos. Lo conté hace un tiempo sobre Apoyo Positivo al explicar cómo es posible eliminar proyectos «molestos» con medidas aparentemente administrativas en el post «Cómo pueden hundir tu proyecto desde las instituciones públicas en un año o menos».

Ahora se suman muchos más casos (aunque por más que busco no consigo encontrar la noticia que oí en la radio, la enlazaré en cuanto la encuentre): Que sólo se había entregado el 12% de lo presupuestado para las asociaciones de la Comunidad de Madrid, y sólo el 30% en el Ayuntamiento de Madrid. Un problema que va mucho más allá de Apoyo Positivo, afectando a toda la red de asociaciones y que, lógicamente, lleva a la ruina a los proyectos más modestos. No es algo nuevo, sucede desde hace años, asfixiando económicamente a las ONG.

El procedimiento es sencillo: Para recibir mi subvención pongo como condición que me demuestres que efectivamente necesitas ese presupuesto. Para eso, antes de recibir el dinero, utiliza todo tu presupuesto (no el que tienes, sino el que supuestamente tendrías cuando recibas al subvención) y demuéstrame con documentación que efectivamente has hecho esos gastos. La jugada es que, una vez que te has endeudado creyendo que vas a recibir ese dinero, retrasarlo por razones aparentemente neutras, burocráticas, administrativas… y mientras, sin recursos ¿adivinas cuáles serán las primeras ONG, asociaciones y proyectos que antes se van a hundir y desaparecer? Efectivamente, los que menos medios tenían al empezar y menos apoyo reciban de bancos, capital privado, etc

 

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Es lo mismo que sucedió con la prensa desde el siglo XIX: Fue suficiente que las empresas (al contratar publicidad) permitiesen que unos medios de comunicación saliesen adelante –obviamente los que defendían sus intereses–, mientras que el resto de medios de comunicación debían competir con esos… pero sin tener recursos económicos. Y a la larga, obviamente, sólo acaban saliendo adelante los que tienen ese pulmón de dinero que tiene su origen en unas pocas empresas.

Una alternativa a eso en nuestro país han sido El Salto como cooperativa via crowdfunding, eldiario.es y, CTXT mediante suscripciones… Alternativas que han tenido que buscar la viabilidad práctica a toda costa (aunque no a costa de lo que sea). 

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