¿Qué hacen las personas dominantes?
(The New Topping Book, BDSM)
24 enero, 2014 a las 11:00/ por moscacojonera
Y hoy otra dosis más de la traducción propia de «The New Topping Book«:
«Encontrando tu personalidad como dominante.
(…) La mayoría de nuestras fantasías surgen de lugares muy profundos en nuestro interior. (…) Extraemos nuestras fantasías de los poderosos arquetipos de la cultura popular, como películas y programas de televisión; de la tortura y las violaciones reales en el mundo que simultáneamente nos fascinan y horrorizan; de recuerdos permanentes de nuestra propia infancia; en resumen, de cualquier sitio a donde nos lleve nuestra curiosidad.
Nuestras fantasías rara vez son sofisticadas, ambiguas o bonitas. Casi nunca incluyen negociación o palabras de seguridad (estas son «redes de seguridad» que se contruyen en nuestro mundo real para hacer que estas fantasías sean seguras a la hora de representarlas). Por esas razones y porque sabemos que querer herir, controlar o humillar a otras personas no está bien, podemos sentir mucha vergüenza sobre nuestras fantasías. Pero una vez superamos esa vergüenza, y descubrimos que mucha gente tienen sentimientos similares, nuestras fantasías se convierten en un campo de juego excitante y feliz.
(…)
La gente en el ambiente publicitario llama a la radio «teatro mental» porque unas pocas palabras bien escogidas y unos efectos sonoros es todo lo que hace falta para crear una situación completa en la cabeza de quien lo está escuchando. Nosotras pensamos que el S/M también es un teatro mental. Es raro que tengas la oportunidad de preparar una sesión llena de accesorios, ropa y guión; más a menudo suele haber un par de cosas —un sombrero elegante, por ejemplo, o un flogger que parece algo que Basil Rathbone usó con Errol Flynn— es todo lo que hace falta para crear y mantener una ilusión. Y, como top, te toca encargarte del guión, la escenografía, de dirigir y de ser el público.
¿SIEMPRE TIENE QUE INTERPRETARSE UN PAPEL?
Muchas de nuestras mejores sesiones S/M las hemos hecho sin recurrir a ningún papel, no éramos Harriet Manrwood o El Despiadado Ming., simplemente éramos nosotras.
De todos modos, cualquier sesión tiene un «aire» que a menudo puede describirse como un papel. Una sesión dura en que se fuerzan los límites, en el que la top actúa como si no le importase nada qué le suceda a su bottom, puede tener el aire de una sesión de tortura o interrogatorio. Una sesión de cuidados, en la que la persona dominando le dice a la persona dominada muchos mensajes del tipo «venga, venga, que puedes aguantar un poquito más», puede tener más un aire a una madre amorosa o un padre amoroso.
Mucha gente es tímida respecto a interpretar unos roles abiertamente y otra simplemente no se excita con ellos, les parece algo falso. Pero, igual que en una sesión con roles en la que la persona dominada quiere ser un caballo y la que domina Superman es propable que tengan problemas, una sesión en la que una parte quiere humillar y la otra quiere ser cuidada no va a funcionar demasiado bien. Por lo que incluso si no te excitan los roles claros, es importante aclarar qué aire quieres que tenga la sesión. Y cuando hablamos en este libro sobre una «sesión con un papi» o una «sesión de interrogatorio» podemos estar hablando sobre una sesión con roles obvios, accesorios y diálogos o puede que estemos describiendo el aire en general de esa sesión».
La imagen salió de http://www.flickr.com/photos/funky64/4153568724/