Squirting
(por Carlin Ross, extracto de «Cómo hacer que una chica tenga un orgasmo».)
16 septiembre, 2013 a las 11:00/ por moscacojonera
«Cada vez que estoy en una fiesta alguien me pregunta sobre la eyaculación femenina. Hay cierta obsesión con ella y cabrea a Betty porque la sexualidad femenina no sigue el modelo masculino de respuesta sexual: Excitación-climax-eyaculación.
«He hecho squirting pero nunca he eyaculado. Lo que quiero decir es que me he sentido liberar fluídos durante la penetración pero nunca he atravesado la habitación con ellos. Hay miles de webs que explican cómo eyacular pero no me interesa. Esta es la razón.
Tras estudiarlo, sé que la auténtica eyaculación femenina no ocupa más que una cucharilla de fluído (ver Whipple* y otrxs, traducido al final). Sí, las mujeres pueden eyacular cuando se estimula la esponja uretral —su punto G- pero estamos hablando de una cantidad muy pequeña de fluído. La única vez que una mujer squirted teniendo sexo conmigo fue cuando estaba usando un dildo (Betty’s Vaginal Barbell, una especie de dildo) empujando hacia arriba por lo que apretaba contra la parte de arriba de su vagina. Mantuve la presión, acariciando de manera constante y liberó un pequeña cantidad de fluído que corrió por los lados del dildo. Era más o menos una cucharilla.
He estado en varios platós de cine porno y te puedo decir que las actrices beben muchísima agua antes de una escena de squirting, litros y litros. Cuando una mujer eyacula hasta el otro lado de la habitación, una cucharilla de ese fluído es eyaculación femenina pero el resto es orina reciente. Las lluvias doradas también son divertidas.
Si quieres aprender a eyacular, simplemente googlea «como hacer eyacular a una mujer«. Resumido, es aguantar —empujando con tu músculo pubocoxígeo— mientras estimulas tu punto G. Betty y yo entrevistamos a Deborah Sundahl** —la madre de la eyaculación femenina— puedes escuchar el podcast aquí (ininglis).
Para terminar, simplemente porque una mujer eyacula no significa que ha tenido un orgasmo. No esán conectadas las dos cosas. Mis amigas que hacen squirting (e incluyo a mis eyaculadoras femeninas profesionales) disfrutan de la sensación de soltarlo pero ten en cuenta que una sensación completamente diferente a tener un orgasmo.
Si te gusta y os excita a ambas personas, a por ello. Tenía un amigo cuya novia eyaculaba tanto que él ponía protección anti-orina debajo de las sábanas para proteger el colchón. Extender toallas encima de las sábanas también reducirá la limpieza. :)
Sólo recuerda que, cuando se trata de orgasmos todo lo que importa es el clítoris…incluso si eyacula.»
Traducción de «Cómo hacer que una chica tenga un orgasmo» (How to make a girl come), un ebook de Carlin Ross.
Al inicio del libro Carlin Ross ya aclara: «Titulé mi libro «Cómo hacer que se corra una mujer» porque es la frase más buscada por la gente cuando acaban llegando a D&R [dodsonandross.com]. Perdón por ser una educadora sinvergüenza. Lo que intento decir es que el sexo acompañado consiste en compartir orgasmos no en «hacer que se corra». Debemos empezar por ahí si quieres ser buen amante.»
Yo en la traducción he puesto casi todo el rato «tener un orgasmo» en lugar de «correrse» (aunque sería más correcto lo segundo) porque «correrse» tiene sentido en España pero no tiene ningún sentido en Latinoamérica. En Argentina y Uruguay es «acabar», Perú y México «terminar» o «venirse», Colombia también «venirse», en Bolivia y Venezuela «terminar» y «acabar», en Chile «acaban» o «se van». Así que tener un orgasmo, a pesar de sonar menos coloquial, parece que puede valer como expresión común en español.
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*http://en.wikipedia.org/wiki/Beverly_Whipple
Beverly Whipple es profesora emérita en la Rutgers University, escritora profesional y sexóloga. Se la conoce afectuosamente como «La inventora del punto G» a partir de su coautoría en la publicación «The G Spot and Other Recent Discoveries About Human Sexuality.»
Después de haber sido enfermera, mucho de su trabajo académico se ha centrado en la mejora de la función sexual femenina. En 1981, fue coautora con Addiego et al de «Female ejaculation: a case study.» El trabajo fue presentado a The Journal of Sex Research e incluye la primera mención publicada del término «G-spot» (punto G).
Después del libro, Whipple continuó publicitando su libro, incluido un vídeo de 9 minutos hecho en 1981 Orgasmic Expulsions of Fluid in the Sexually Stimulated Female. (Expulsiones de fluido orgásmicas en la mujer sexualmente estimulada). En 1984, Journal of Sex Research describió el debate que rodeaba la eyaculación femenina como «acalorado».
Sus técnicas incluyen usar escáneres de resonancia magnética para determinar objetivamente qué está sucediendo en el cerebro. Sus experimentos con animales ayudaron a aislar el péptido vasoactivo intestinal y el descubrimiento de que los orgasmos pueden tener una vía alternativa al cerebro a través del nervio vago sin pasar por la espina dorsal, lo que permite a las mujeres con lesiones de médula espinar conseguir orgasmos sólo a través de estimulación psicológica.
Extra: Un vídeo (ininglis) de Beverly Whipple «Cómo tener un orgasmo», sobre punto G y eyaculación femenina
**Sólo encontré un artículo sobre Deborah Sundahl en Vice, qué se le va a hacer, con lo poco que me gusta el punto de vista de la revista…